Este tratamiento denominado en Clínica Bonome Ka Holi y usado en la pérdida de peso tiene asociado además de la colocación del balón Allurion, un programa con seguimiento de asesoramiento nutricional, en el que se incluyen las revisiones periódicas, lo que nos afianzará los resultados y se podrán mantener a largo plazo.
El primer día tras la colocación del balón gástrico Allurion, los pacientes no podrán ingerir alimentos sólidos, debiendo consumir sólo líquidos.
En la segunda jornada, se permite tomar alimentos blandos, así de manera progresiva y controlada, llegando a una dieta normal en la que se puede comer de todo, aunque siempre con moderación.
Es fundamental que los pacientes adquieran conciencia de su ingesta calórica, reduciéndola en la medida de lo posible para optimizar los resultados del tratamiento.